Luego del asesinato del joven Fernando Báez Sosa a manos de un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell, mucho se habló de los casos de violencia en los que se ven involucrados jugadores de rugby. Pero casi no se escucharon voces de protagonistas de este deporte haciendo una evaluación integral de estos hechos o al menos expresando sus condolencias por los ocurrido con la víctima, que fue salvajemente atacada por los deportistas oriundos de Zárate. Debido a este contexto, un juvenil rugbier rosarino, que juega para Atlético del Rosario, usó las redes sociales para publicar una valiente carta que lleva como título “Sí, fuimos nosotros”.
Tomás Hodgers es un rosarino de 23 años que juega en Plaza Jewell. Se vio movilizado por el aberrante hecho ocurrido el fin de semana pasado en Villa Gesell y escribió un texto que ahora se está viralizando rápidamente en las redes sociales.
“Sí, fuimos nosotros”, es el título que eligió, como contrapunto a los que tratan de desligar al rugby de este tipo de hechos violentos.
“Nadie se animó a decir que fuimos nosotros. Nosotros, los que vivimos en el hermético mundo del rugby, nos convencemos de que no tenemos nada que ver con diez u once loquitos que le pegan en el piso a un pobre pibe hasta matarlo. Nos desentendemos. Eso viene de casa, decimos para sentirnos mejor”, sigue la carta escrita por el joven deportista rosarino.
“Nos indignamos porque creemos que nos estigmatizan, que nos ponen a todos en la misma bolsa e intentamos impetuosamente mostrarle a la realidad que tan equivocada está con este prejuicio”, agrega.
Luego expresa: “Argumentamos que nuestros valores son superlativos y que no existe deporte más digno y honorable que el nuestro. Decimos que es un deporte de bestias jugado por caballeros y se nos infla el pecho. Nos llenamos la boca hablando de Nelson Mandela y del respeto al árbitro, del tercer tiempo y la camaradería”.
En la parte más autocrítica de la carta, Tomás escribe: “Nos creemos el ejemplo y nos creemos moral y físicamente superiores al resto. Es por este narcicismo colectivo, por este convencimiento ficticio que tenemos de nosotros mismos que nadie, ni una sola persona en el ambiente del rugby se animó a decir que fuimos nosotros”.
“Pero sí, fuimos nosotros, los que habitamos el diminuto mundo del rugby, los que formamos a once desquiciados que mataron con saña y odio a un pendejo indefenso”, reconoce Tomás Hodgers en sus cuentas de Twitter, Facebook e Instagram.
Después, el jugador de Atlético del Rosario enumera algunos de los casos que involucraron a rugbiers: “Lamentablemente también eran nuestros los acusados de violar entre cinco personas a una chica en La Plata, y los que golpearon salvajemente a un linyera en Olivos porque estaban aburridos. También eran colegas los que abusaron a una chica en Miramar, los que le desfiguraron la cara a un pibito en Quilmes por chocar un auto y los tucumanos que casi matan a un empleado en un boliche de Pinamar. Es jugador de rugby, también, el rosarino al que filmaron golpeando salvajemente a su novia y que hoy camina como si nada hubiese pasado. Digámoslo, fuimos nosotros”.
“Diciendo que fuimos nosotros vamos a poder mirar a los ojos a todas esas víctimas y pedirles perdón sin vergüenza”, dice Tomás en la parte final de su escrito.

La publicación se viralizó rápidamente y recibía cientos de comentarios, la mayoría de éstos reconociendo su valentía para salir a hablar del tema en un momento tan comprometido.