Sucedió en Villa Gobernador Galvez. La formación, que transportaba 68 vagones cargados con cereal hacia los puertos rosarinos, fue interceptada por una multitud que cortó su sistema de frenos y saqueó el contenido de 26 contenedores.
En un impactante episodio de inseguridad rural, un grupo de delincuentes emboscó y detuvo un tren de carga de la empresa Ferroexpreso Pampeano, robando unas 1000 toneladas de soja. El hecho ocurrió el pasado 26 de octubre cerca de la localidad de Villa Gobernador Gálvez, en las cercanías de Rosario.
La formación, que transportaba 68 vagones cargados con cereal hacia los puertos rosarinos, fue interceptada por una multitud que cortó su sistema de frenos y saqueó el contenido de 26 contenedores.
El tren de Ferroexpreso Pampeano, una de las tres empresas privadas de transporte ferroviario de carga de Argentina, sufrió graves daños en su operación habitual cuando, en plena ruta hacia el puerto, los delincuentes lograron detener la formación al cortar las mangueras de freno.
Tras inmovilizar el tren, un centenar de personas vaciaron los vagones de cereal, logrando llevarse la totalidad de la soja de 16 vagones y parte de la carga de otros 10. Las estimaciones iniciales calculan una pérdida equivalente a 1000 toneladas de soja, aproximadamente 35 camiones cargados.
El hecho fue denunciado el 28 de octubre ante la policía provincial. Sin embargo, los robos a trenes en la región de Rosario han sido una constante en los últimos años, afectando a las principales empresas ferroviarias de carga que abastecen los puertos de exportación del Gran Rosario.
A pesar de las medidas de seguridad implementadas por las compañías ferroviarias, estos robos no solo generan pérdidas millonarias, sino que también representan un riesgo potencial de accidentes tanto para el personal como para los propios delincuentes.
Este tipo de hechos delictivos afecta directamente la competitividad de las exportaciones argentinas, que dependen de la fluidez en el transporte de cereales desde las zonas productoras hacia los puertos de salida.
Los operadores ferroviarios de carga han insistido en la necesidad de implementar estrategias de seguridad más eficaces para combatir estos ataques que no solo perjudican la economía local, sino que también amenazan la seguridad y la sustentabilidad del transporte agrícola en el país.