Osvaldo Montanari es un productor de la zona de Venado Tuerto y Villa Cañas, plena zona núcleo, y lidera una empresa familiar asociado a su hermano. Fundamentalmente hacen agricultura con la rotación clásica: maíz, soja y trigo.
Con manejo de ambientes, agricultura de precisión, fertilización y maquinaria de punta, logran producciones interesantes.
“Es muy importante la siembra. Es fundamental tener un buen nacimiento, buena distribución y profundidad uniforme de la semilla para que no haya competencia entre las plantas. El primer paso que tiene estar muy bien hecho para lograr un muy buen rinde”, remarcó.
Y en este último punto, es donde Osvaldo se destaca. Porque es uno de los pioneros de las nuevas tecnologías en las sembradoras utilizando prototipos de la marca Agrometal, donde lleva una relación de 40 años. “Estoy dispuesto a colaborar y hacer lo que está a nuestro alcance para mejorar el producto”, analizó. “Esto se hace a partir de un acuerdo con Agrometal. A ellos le interesa mejorar el producto y a nosotros nos interesa que le hagan esas correcciones para poder mejorar la siembra”, indicó Osvaldo, haciendo hincapié que es un win to win. “En una forma pactada, armónica y combinada. Están predispuestos a que si hay alguna falla en la sembradora, le digamos para que la mejoren”, agregó.
Así, una vez que son probadas y mejoradas, la empresa las produce en serie para comercializarlas en su fábrica situada en la localidad cordobesa de Monte Maíz. En este sentido, sostuvo que el productor o el usuario que use la maquinaria le va a encontrar más defectos que el fabricante.
“Tenemos una mejor siembra, tanto en grano fino como grano grueso”, sintetizó sobre los beneficios de las nuevas maquinarias que adquirió. “Al aplicarle el equipo de Precision Planting, que son motores eléctricos, que van surco por surco y cortan de forma individual, hay un mejor aprovechamiento de la semilla porque no hay superposición. Además, es un sistema donde se marcan las cabeceras, por lo que cuando llega a ese lugar, corta en el primer surco que está sembrado”, describió.
Además, compraron también el DeltaForce, un sistema que mantiene la profundidad de la semilla. “Donde la tierra está dura, el actuador genera mayor presión sobre el cuerpo de siembra por lo que mantiene la semilla a la misma profundidad. Antes, las otras máquinas no clavaban el cuerpo y la semilla quedaba más arriba o destapada”.
Además, el Dosificador de Precision Planting es muy preciso, donde marca las fallas en una plataforma arriba del tractor.
Otro aspecto que mencionó Osvaldo es que la fertilización la realizan previo a la siembra. Tiran al voleo 200 kilos de fósforo en todos los lotes una vez que se cosecha el cultivo. Y luego, previo a la siembra, en este caso de maíz, le aplican con un pulverizador el nitrógeno . Todo esto es para no hacer la fertilización durante la siembra. “A la sembradora la usamos para sembrar, no para fertilizar. Nos da un gran rendimiento en la maquinaria, porque no se pierde tiempo al cargar fertilizante y es más rendidor el trabajo.

Fuente: Clarin Rural