En un hecho sin precedentes, el jefe de la Policía Federal Argentina (PFA) de la delegación de Santa Fe, Mariano Valdés, fue emboscado y baleado en la autopista Buenos Aires-Rosario. Cuatro hombres encapuchados lo interceptaron y lo atacaron a balazos. Uno de los disparos impactó en la ingle del comisario, por lo que debió ser trasladado a un hospital de la de Arroyo Seco, donde se encuentra estable.
El episodio se produjo a menos de 24 horas de que el fiscal federal Walter Rodríguez denunció complicidad entre las fuerzas federales de Santa Fe y las bandas criminales -vinculadas al narco- de esa provincia. El hecho tuvo lugar en el kilómetro 256 de la Ruta Nacional 9. En diálogo con LT8 aseguró que la situación es de "gravedad institucional".
Según el relato de Valdés, una camioneta se puso a la par del Ford Focus que conducía y desde su interior partió una lluvia de balas que impactó en diferentes puntos del vehículo. Junto al jefe de la Federal se encontraba una suboficial ayudante que resultó ilesa.
Valdés llegó a la delegación de Santa Fe luego de que el jefe de la fuerza, Néstor Roncaglia, desplazara a seis efectivos con presuntas vinculaciones con el delito. Se los removió por los delitos de incumplimiento de deberes de funcionario público, falsedad ideológica, falso testimonio, cohecho e infracción de la Ley 27.737.
El fiscal federal Rodríguez dijo en la entrevista que le envió una carta a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a través de la que le expresó su preocupación por esta clase de incidentes y la instó a tomar medidas para combatir este flagelo en las fuerzas federales. Desde la cartera contestaron que aún no recibieron nada.