Este 10 de diciembre se cumple el primer año de Leonel Chiarella como Intendente de Venado Tuerto. El joven radical llegó al sillón de Aufranc en un hecho histórico, cortando con 12 años de Jose Freyre y otros 12 anteriores de Roberto Scott.
Con mucha expectativa, el primer anuncio de Chiarella fue el plan de austeridad, que consistía, entre otras puntos, el congelamiento de sueldos del gabinete e intendencia. También se cesanteó a mas de 30 empleados municipales que cobraban sin trabajar.
Pero la realidad sorprendió rápidamente al nuevo Intendente con dos grandes inundaciones que golpearon a varios barrios de Venado Tuerto. El mismo Chiarella, con su equipo, tuvo que salir a socorrer a los vecinos.
Luego llegó lo ya conocido por todos; la pandemia que sorprendió al mundo. Chiarella y su gabinete tomaron varias decisiones como aumentar los testeos, restringir horarios, crear el centro de aislamiento, apoyo y donaciones al Hospital y apelar a la responsabilidad de los vecinos, pero nunca estuvo de acuerdo con una cuarentena estricta que impactará fuertemente en la economía.
En medio de la pandemia, que aún continúa, Chiarella tuvo que hacer frente, entre otras cosas, al caso del Supermercado La Anónima y sus mil kilos de carne en mal estado, a varios allanamientos por narcotráfico, los casos de Lucas Cabral y Facundo Vaca, la puesta en marcha de la utilización del casco obligatorio y hasta el ataque mediático de Alejandro Fantino.
Sin lugar a dudas el gran anuncio fue la puesta en venta de 110 terrenos municipales. También sobresale la visita del Presidente Alberto Fernandez a las plantas de Corven y Syngenta. 
A Chiarella aún le quedan al menos tres años más como Intendente de Venado Tuerto y los desafíos serán aún más grandes; la continuidad de la pandemia y la logística del plan de vacunación, las elecciones en las cuales se elegirán cinco concejales, y los imprevistos que tiene una ciudad con casi 100mil habitantes.