Los cuadros de Diana Sacayán y la oriunda de Venado Tuerto, Claudia Pía Baudracco, fueron incorporados al Salón de las Mujeres en Casa Rosada. Este miércoles, en un acto con familiares de las dos históricas militantes y referentas del colectivo travesti trans, se descubrieron los cuadros que lucirán en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada como parte del reconocimiento y homenaje a sus trayectorias.
La secretaria de Políticas de Igualdad y Diversidad, Paulina Calderón, y la subsecretaria de Políticas de Diversidad, Agustina Ponce, encabezaron el acto descubrimiento de los cuadros de la venadense Claudia Pía Baudracco y Diana Sacayán en el Salón de las Mujeres Argentinas del Bicentenario en Casa Rosada. El homenaje contó con la presencia de organizaciones, referentes y familiares como Victoria Baudracco y Say Sacayán.
“No puedo más que agradecer en nombre del Estado Nacional, a todas ustedes y, puntualmente, a Pía y a Diana por todo lo que hicieron para que este país sea mejor”, sostuvo Calderón, y aseguró: “El logro es colectivo. Ustedes nos han enseñado a luchar, y si bien sigue faltando, nosotras sabemos de resistencia y jamás damos por conquistados los derechos, los defendemos siempre”.
Por su parte, Ponce destacó que, “si bien falta mucho, este acto es reparador”, y resaltó: “Nuestro deber como militantes y políticas es entregar al pueblo entero las banderas que se levantan por ellas dos. Me tocó recorrer el país y en todos lados encontré las caras de Claudia y de Diana. Eso habla de que además de grandes militantes eran dos buenas personas”.
En este sentido, hizo hincapié en la Ley 27.636 de Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgéneros: “Hablamos mucho de la dignidad humana y, para mí, es la posibilidad de tener y llevar adelante proyectos de vida. Lo que hace esta Ley de Cupo Laboral es aportar un poco más en ese rumbo. Tal vez no resuelve todos los problemas que tenemos, pero aporta dándonos una posibilidad más”.
Por último, afirmó: “Si hubieran podido elegir no habrían elegido ser discriminadas, pero si tuvieran que volver a nacer serían trans, porque así eran felices. Ellas y sus banderas pertenecen a toda la sociedad”.
Posteriormente, tomaron la palabra diferentes referentas de organizaciones travestis y trans, y funcionarias públicas, quienes reivindicaron la lucha de Diana y Pía por los derechos del colectivo LGBTI+ y las recordaron como símbolos de militancia por un país más justo e igualitario.
Una vida marcando el camino
Claudia Pía Baudracco nació el 22 de octubre de 1970 en Córdoba, aunque pasó su niñez y adolescencia en Venado Tuerto y luego se mudó a Buenos Aires. Como todas las travestis y trans nacidas en aquel contexto, fue también víctima de la violencia institucional y eso la motivó a organizarse junto a sus compañeras para lograr en 14 provincias la derogación de los Códigos de Faltas que criminalizaban la identidad trans. Además, realizó actividades de prevención e investigación sobre el sida y las enfermedades de transmisión sexual.
Con 41 años, falleció el 18 de marzo de 2012 sin acceder al reconocimiento de su identidad de género, ya que la ley fue sancionada pocos meses más tarde. Ese año, en homenaje a ella, se instituyó la fecha de su muerte como el Día de la promoción de los derechos de las personas trans.
Por su parte, Amancay Diana Sacayán nació el 31 de diciembre de 1975 en la provincia de Tucumán, aunque su familia pronto se trasladó a la localidad de Laferrere, en el partido bonaerense de La Matanza. Con una infancia en dictadura y una persecución al colectivo travesti trans que se extendía aún en democracia, fue víctima de violencia institucional y detenida por las fuerzas policiales. En la cárcel inició un activismo que mantuvo hasta el último día de su vida y que, a partir de la organización colectiva que encaró, logró conquistas para toda su comunidad tales como los consultorios médicos para la población trans, el Cupo Laboral Travesti Trans en la provincia de Buenos Aires y la Ley de Identidad de Género a nivel nacional, sancionada en 2012. Fue la primera travesti en recibir, de manos de la entonces presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, el DNI con su nombre e identidad autopercibida.
Diana se dedicó a mejorar la calidad vida de quienes tienen una expectativa vital que ronda los 40 años. Esa edad rondaba el 11 de octubre de 2015, cuando fue brutalmente atacada y asesinada en su domicilio. En su caso, por primera vez, se incluyó como agravante el odio a la identidad de género de la víctima.
Por el MMGyD estuvieron presentes también la subsecretaria de Formación, Investigación y Políticas Culturales para la Igualdad, Julieta González Salinas; el director de Investigación, Innovación y Promoción del Desarrollo con Perspectiva de Género, Bruno Bazán; la directora de Articulación Territorial para la Asistencia y Atención a las Víctimas, Sibila Botti; le directore de Protección de Derechos de la Diversidad Sexual y de Géneros, Magui Fernández Valdez; la coordinadora de Políticas de Salud Inclusiva, Valeria Paván; la coordinadora de Acceso al Empleo para las Personas Travestis, Transexuales y Transgéneros, Cintia Pili; y la coordinadora de Fortalecimiento de la Sociedad Civil, Gema Rosales.
Asimismo, participaron la representante especial sobre Orientación Sexual e Identidad de Género de la Cancillería, Alba Rueda; el director de políticas y prácticas contra la discriminación del INADI, Darío Arias; y la diputada nacional Mónica Macha.
